Remolinos humanos y un espectral fuzz en “Pantitlán”, el nuevo y estremecedor sencillo de Mengers
¿Existe algo más crudo y real que la estación de metro Pantitlán a las 6 de la mañana?… con esta premisa, el trío de la CDMX presenta un reluciente y distorsionado track que adelanta su siguiente álbum, GOLLY, mientras se acompañan de un caleidoscópico video para envolver dicha escena.
Encontrar el encanto dentro de la
férrea monotonía nunca ha sido fácil; es dejarse llevar y salir lo más ilesos
posible, o ir contra corriente y aprender a disfrutar del áspero viaje. El
sonido de Mengers sigue, desde hace tiempo, ese segundo camino, el de la
resistencia, el de alzar la voz y enfrentar lo que parece inevitable;
poseedores de un sonido encomendado hacia el garage, el punk y la psicodelia,
el trío capitalino presenta “Pantitlán”, un track que se levanta
y se consume dentro de sí mismo, dejando una estela de fuzz como fiel testigo.
Guitarras a tope, líneas de bajo bien
remarcadas y una batería que se conduce de forma más cadenciosa marcan una
nueva forma de andar, un andar más pausado que refleja la madurez de una banda
clara de pensamiento y más fina en ejecución, capaz de transitar por los mismos
caminos de la psicodelia y la crítica a un sistema que hay que
romper.
Para esta nueva entrega, la banda de
Carlos, Pablo y Mauricio, decidió bajar la velocidad, subirle al reverb y con
el fuzz a tope, construir un monumental tema de más de cinco minutos en el que
retratan de forma metafórica la rutina que consume a miles de personas dentro
del juego de la sobrevivencia cotidiana.
Junto con el track, los Mengers estrenan un caleidoscópico video dirigido por el mismo Pablo Calderón y cuya narrativa no podría retratar de mejor forma la monotonía citadina convertida en un ciclo infinito: el metro andando pesarosamente sobre los túneles que conectan el Edomex con la CDMX. Con un estreno redondo bajo el brazo, la banda pasó por la casa y nos contó el significado detrás de “Pantitlán”, el tercer adelanto de GOLLY, su próximo disco, y primer track lanzado en conjunto con el sello Devil in the Woods.
Contrastando con
“Celebra” o “Tiempos Suicidas“, que son
tracks más enérgicos desde la lírica y el mensaje hasta la ejecución y el
sonido, “Pantitlán” suena más ligero, pero sin dejar el mismo
sentido crítico de los anteriores, ¿Cuál es la idea y el sonido particular
detrás de este nuevo tema?
“En realidad todo el álbum habla de que
vivimos en una simulación en donde todo es monótono y repetitivo pero también
de que podemos rebelarnos ante esa simulación. Como tal, sentíamos que era
necesario crear un track que tratara de la monotonía y la opresión pero no
desde el punto de vista común y desgastado de canciones como “La Carencia”…
Queríamos que esa monotonía tuviera giros inesperados, que fuera un mantra que
se rompiera constantemente y terminara con un futuro incierto, algo que fuera
más realista. Al final de cuentas la realidad es un poco eso. Sí, todos los
días sigues una rutina, pero si analizas detenidamente ningún día es el mismo
exactamente que el anterior, siempre alrededor hay cosas que rompen. En los
ensayos decíamos que teníamos que hacer una canción que hablara de que la
realidad es psicodélica, de que no era necesario irse a buscar flores, hablar
del peace & love o del cosmos para encontrar todo lo que propone la “psicodelia”
en sí misma.”
Dentro de esa metáfora de la rutina
como una espiral interminable que nos atrapa a todos, ¿Qué significa “Pantitlán”,
que hace referencia a uno de los lugares más representativos de la ciudad?
“Usar Pantitlán como título tuvo dos
razones: la primera es porque es la zona de inicio de jornada para miles de personas,
es el punto de inicio de la Ciudad de México para mucha gente que vive en el
oriente del Edomex, pero nuestra favorita es porque, en su traducción del
Náhuatl, Pantitlán quiere decir “entre banderas”. Resulta que en lo que hoy es
Pantitlán se formaban remolinos gigantes de agua que tiraban las embarcaciones
y, para avisar que era zona de remolinos, los navegantes pusieron banderas.
Actualmente el agua desapareció de la zona pero los remolinos siguen ahí: miles
de personas se arremolinan para poder avanzar, y empezar su día. Todo se mezcla
al momento en que se abren las puertas. ¿Hay algo más psicodélico que remolinos
humanos? La segunda razón es solamente para molestar, todas las canciones
psicodélicas siempre buscan nombres muy mágicos y fuera de la realidad y
queríamos romper un poco con eso. ¿Existe algo más crudo y real que la estación
de metro Pantitlán a las 6 de la mañana?”
Este nuevo track lleva desde el título
y una crítica a la desigualdad que existe en la misma CDMX, un discurso por el
cual se han pronunciado anteriormente, ¿Cuál es la importancia de hablar desde
su música sobre esos temas reales?
“Pantitlán es la muestra más clara de
que el discurso oficial de la clase adinerada es falso. Hay gente que se
levanta todos los días a las 6 de la mañana para poder esperar -a veces horas-
por entrar a un vagón. Esa gente no es floja, todos los días está ahí desde
temprano para seguir en esta maquinaria gigante. Pero no por ser una maquinaria
gigante quiere decir que no podemos a veces romperla. Sobre la importancia de
hablar de la realidad, desde siempre hemos estado interesados en temas
políticos y sociales, pero por alguna razón, las letras de Mengers no hablaban
de esa realidad. Un día hablando entre nosotros nos dimos cuenta de que el
racismo, el autoritarismo, el clasismo y el facismo están ocupando a lo largo
del planeta cada vez más espacios. Muchas veces, esas personas llegan lejos
porque nadie las calla a tiempo. Y justo eso es lo que al menos hace unos años
pasaba; cuando vemos a los racistas ser racistas hemos preferido voltear a otro
lado y no decir nada. A veces el silencio implica complicidad y no queríamos
ser cómplices, queríamos, si no denunciarlo, sí poner el tema sobre la mesa y
tratar de demostrar que el ruido también es una forma de alzar la voz cuando no
tienes palabras. No sabemos si seguiremos hablando de temas reales por siempre,
pero al menos en estos tiempos, nos sentimos cómodos hablando de ello.
Aparte… alguien tiene que hacerlo.”
Sabemos que el sonido
de Mengers es potencia y distorsión, pero luego de escuchar estos primeros
adelantos, notamos que hay momentos más altos que otros en cuestión de
velocidad y potencia misma, ¿Cuál es la línea que sigue el próximo material?
¿Cómo han planeado la narrativa de GOLLY a través de los tracks?
“En realidad la creación de la música
para GOLLY fue algo muy divertido. Hacíamos una canción, la tocábamos en vivo y
veíamos como fluía entre nosotros y la gente. Si fluía bien, la seguíamos
tocando en los shows siguientes. Por lo mismo, muchas de las canciones son
rápidas, fue lo que más funcionaba en los shows. Sin embargo, hay tres o cuatro
tracks que hicimos en la sala de ensayo sin probarlos en los shows. Esos tracks
son los más tranquilos… Y tranquilos es un decir, en realidad el fuzz siempre
está a tope, solamente bajamos un poco la velocidad. Ahora que estuvimos
acomodando los tracks para GOLLY, tratamos de que se mantuviera un poco esa
energía del show en vivo pero sin dejar en un rincón al final del disco los
tracks tranquilos. Cuando vimos que la música fluía entre los tracks, tratamos
de ajustar algunos para que hubiera un discurso. No sabemos si fue la mejor elección,
pero al menos es la que más nos convence. El punto de “Pantitlán”, GOLLY y la
vida -tal vez-, es el hecho de que no siempre se puede hacer todo lo que se
quiere, pero siempre te puedes divertir y callar algunas bocas en el intento.”
“Pantitlán” es uno de los sencillos que se desprenden de GOLLY, el que será el nuevo disco de la banda capitalina, misma que lanzará dicho LP bajo el sello Devil In The Woods.